¿Qué es un exfoliante oleoso?
Los exfoliantes son productos cosméticos cuyo objetivo es limpiar y liberar el rostro o cuerpo de impurezas. La exfoliación se realiza mediante la eliminación de las capas superficiales de la piel y sus células muertas. Pueden aportar varios beneficios para la piel y existen diferentes métodos de exfoliación o peeling.
Si lo que queremos es exfoliar y nutrir profundamente nuestra piel, esta, sin duda, es la mejor opción. Nuestro Exfoliante de azúcar cumple esas dos funciones notablemente. ¿Cómo? Mientras nos frotamos en la piel el exfoliante, el azúcar retira las células muertas y la mezcla de Aceites nutre increíblemente la piel. Usted lo notará al instante. Puede utilizarlo como parte de su pedicure y amará los resultados!
Exfoliar la piel es limpiarla en profundidad liberándola de células muertas e impurezas para potenciar su belleza natural. Así mismo gracias al masaje al realizar la aplicación de la crema exfoliante se consiguen más beneficios como activar la circulación sanguínea. Existen diferentes tipos de exfoliantes según sea la zona del cuerpo a tratar: rostro, cuerpo o pies y según sean los beneficios buscados: eliminar el exceso de sebo, mejorar el nivel de hidratación, combatir la celulitis o eliminar la piel muerta o las durezas entre otros. Por lo tanto, todo son ventajas a la hora de integrar esta rutina de exfoliar la piel una o dos veces por semana en tu rutina de cuidado.
¡Como usar un exfoliante !
· Aplica tu exfoliante en frente, nariz y mejillas.
· Nunca apliques el exfoliante facial en ojos y boca.
· Extiende el exfoliante de forma uniforme; empieza por la frente y continúa hacia las sienes y ve bajando por el rostro.
· Frota suavemente desde el puente hacia la punta de la nariz
· Extiende el exfoliante con pequeños movimientos circulares desde las aletas de la nariz hasta las mejillas.
· Baja hacia la mandíbula y la barbilla.
· Aclara el exfoliante facial con abundante agua tibia.
Nuestra piel está renovándose constantemente. Cada 28 días, células nuevas reemplazan las muertas y lo hacen de manera natural.
Sin embargo, el cuerpo no tiene la capacidad de eliminar todas las células muertas. Además, con el tiempo, el ritmo es cada vez más lento. Como resultado, los poros se tapan, la piel no se oxigena ni absorbe los nutrientes que necesita para sentirse ni verse bien.
La exfoliación elimina ese exceso de células muertas acumuladas en la epidermis que el cuerpo es incapaz de retirar. Es un proceso que complementa este fenómeno natural y ayuda a que la piel se vea nueva, fresca y luminosa.